¿Cómo cuidar las cicatrices después de una cirugía?

La cicatrización es un proceso que realiza el organismo de manera natural después de sufrir una herida, sin importar si se produjo por un accidente o tras una cirugía. La rapidez y calidad de la misma, depende de diferentes factores, tanto genéticos como de su localización, profundidad y extensión.

En el ámbito médico existe un dicho: “el cirujano hace la costura y el paciente la cicatriz”, porque el proceso de curación puede llegar a ser de un año y su evolución depende del cuidado que cada persona tenga. Esto, por supuesto, no aplica en el caso de cicatrices queloides (aquellas que tienen un crecimiento excesivo y son mayores que la herida que las originó).

Para lograr que las cicatrices pasen de rojas y abultadas a unas poco visibles, existen cuatro consejos esenciales a tomar en cuenta, de acuerdo con la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica:

1. Dejar de fumar o disminuir considerablemente el número de cigarrillos antes de una cirugía. El tabaco afecta la oxigenación de la sangre y perjudica una buena cicatrización.

2. Mantener la zona de la cicatriz hidratada tras la operación, utilizando cremas e hidratantes e incluso aloe vera.

3. Evitar el sol y si se trata de una zona del cuerpo expuesta utilizar protector solar, aunque el día esté nublado o lluvioso.

4. Masajear la cicatriz para lograr que al tacto y a la vista quede lisa, uniforme y plana.